Los colores juegan un papel importante en nuestra vida, y ya no solo a nivel estético y cultural, también afectan a las emociones, definen la personalidad y alertan de los peligros. Sin ir más lejos, el verde transmite calma y serenidad y el rojo urgencia y advertencia. A la hora de decorar un hogar, tener en cuenta los colores que se escogen es crucial para conseguir construir un ambiente agradable y cómodo para todas aquellas personas que lo habitan. Para poder indagar más en la relación entre el color y la decoración, vamos a aprender cómo funciona la clasificación de colores.
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Índice de contenidos
¿Qué es el color?
En su definición más técnica, el color es el espectro visible de las diversas longitudes de onda que emite la luz. Como bien sabrás, hay ondas que el ser humano no es capaz de percibir, como la infrarroja o la ultravioleta. Los colores visibles son todas aquellas longitudes que sí podemos percibir a través del ojo humano. Para poder obtener la clasificación de colores, se han establecido diversas agrupaciones y categorías que permiten diferenciar unos de otros y atender así todas sus características.
Clasificación de colores
¿Verdad que el azul cielo y el azul ultramar son fáciles de diferenciar? Aun siendo el mismo color, sus particulares propiedades hacen que sean totalmente diferentes. Vamos a ver cuáles son estos rasgos, cómo funciona la clasificación de colores y cómo estas características nos ayudan a definir los colores con exactitud.
Temperatura del color
Los colores se pueden clasificar según su temperatura, cuanto más cálidos sean, más se les relacionará con altas temperaturas. Por el contrario, los colores fríos son aquellos que, como su propio nombre indica, relacionamos con bajas temperaturas. Tonos como el azul, el verde y el morado se consideran colores fríos, mientras que los marrones, naranjas, amarillos y rojos se consideran cálidos.
Pero espera, esto no es tan sencillo como parece. Existen azules cálidos y naranjas fríos, ¿lo sabías? Esto se debe a su tonalidad.
Propiedades del color
La clasificación de los colores atendiendo a sus propiedades tiene 3 grandes protagonistas:
- Tono o matiz
El tono se refiere a la combinación de luces o tintas exacta que se requiere para crear un color. Tal y como ves en la imagen, un azul cielo estará más próximo al blanco que al negro y contendrá prácticamente la misma cantidad de luz azul que de verde. Sin embargo, el azul ultramar se acerca más al negro que al blanco y la cantidad de verde es mucho menor que la de azul.
Cuando hablamos de RGB, cuanta mayor cantidad de cada una de las luces que lo conforman tenga un color, más claro será. ¿A qué se debe? Más adelante te lo contamos.
- Saturación
La saturación es la intensidad de un matiz, en una escala que va del gris hasta el color en cuestión, cuanto más alejado esté del gris, más saturado será un color.
- Brillo o luminosidad
El brillo es la cantidad de luz que tiene ese color, cuanto menos brillo tenga, más cerca estará del negro, por lo que más oscuro será. Cuanto más alejado esté del negro, más claro.
RGB y CMYK: Síntesis aditiva y sustractiva
¿Recuerdas que al hablar de RGB, cuanta más cantidad de luz de cada color, más claridad? Por el contrario, cuando se trata de CMYK, cuanta más cantidad de cada tinta haya en un color, más oscuro será. Como ves, en CMYK hablamos de tinta, y en RGB hablamos de luces. Pero ¿qué es RGB y CMYK?
Son los dos tipos de clasificación de colores más utilizados a la hora de definir un color de forma profesional, pues permiten extraer códigos concretos sobre una tonalidad, como por ejemplo el #7CDDEB del azul cielo anterior.
- RGB (red, green, blue): es la forma en la que nos referimos al color cuando se habla de luces (focos, pantallas, cámaras…), pues tal y como te hemos contado antes, unir luces de todos los colores nos daría como resultado el blanco. También se conoce esta propiedad como síntesis aditiva.
- CMYK (cian, magenta, yellow, black): cuando hablamos de colores tangibles, como por ejemplo la pintura acrílica o tintas de impresión, hablamos de síntesis sustractiva. Si pruebas a mezclar todos los colores, el resultado será un color oscuro.
¿Y por qué se escogieron estos colores y no otros? Es normal que cuanto más leas, más dudas te asalten. Como ves, el mundo del color no es tan sencillo como parece, pero tranquilo, prometemos resolver todas tus dudas.
Colores primarios, secundarios y terciarios
A partir de los colores primarios y secundarios, se puede obtener el resto de la gama de colores. Vayamos por partes:
- Colores primarios: son aquellos colores que no pueden obtenerse a partir de la mezcla de otros pero a partir de los cuales obtenemos el resto de colores. RGB son los colores primarios en la luz y CMY los colores primarios en el pigmento.
- Colores secundarios: Si mezclamos dos colores primarios en la misma cantidad, obtenemos un color secundario.
- Color terciario: Por último, un color terciario es el resultado de la mezcla de un primario y un secundario en la misma cantidad.
¿Cómo percibimos los colores?
Cuando hablamos de percepción podemos referirnos tanto a una percepción subjetiva y psicológica como a la percepción científica. Estás de suerte, porque a continuación vamos a explicarte ambas:
Percepción de los colores a nivel óptico
¿Sabías que somos capaces de percibir hasta 10.000 millones de colores? Gracias a los conos y los bastones, somos capaces de percibir las diferentes longitudes de onda que rebotan en los objetos y que crean el color en nuestro cerebro.
- Conos: son las células que permiten que percibamos y diferenciemos los colores. Están compuestas por tres tipos de pigmento: rojo, verde y azul. Estas células fotorreceptoras se encuentran en el centro de la retina y son las principales encargadas de que podamos ver los colores
- Bastones: los bastones son otras células fotorreceptoras que se encuentran en el borde de la retina pero que, a diferencia de los conos, tienen diversas funciones. Entre ellas, se encuentra la visión nocturna. Cuando nos encontramos en ambientes poco luminosos, no somos capaces de percibir los colores pero sí podemos ver nuestro entorno en una escala de grises.
Percepción de los colores a nivel psicológico
La psicología del color determina cómo percibimos los colores, por qué relacionamos el negro con la elegancia y el amarillo con la alegría, por ejemplo. Esta percepción está ligada a nuestra educación, entorno, cultura y experiencia, 4 factores que juegan un papel decisivo en cuanto a la percepción de los colores y la construcción de su significado.
Los colores influyen en nuestro estado de animo, tanto es así que escoger cuáles serán los colores que decorarán nuestra casa podría contribuir en nuestro bienestar y comodidad.
Escoger colores pastel, caracterizados por ser colores poco saturados y claros, creará un ambiente de calma y bienestar en el que nos sentiremos cómodos y relajados. Por el contrario, una habitación con paredes rojas nos pondrá en estado de alerta y creará tensión, es por ello que son pocas las personas que escogen este color para pintar las 4 paredes de una habitación.
El verde y el marrón son dos de los colores más utilizados a la hora de decorar un espacio interior, pues evocan paz, naturaleza y tranquilidad, tres sensaciones que deseamos percibir en nuestro hogar.
No cabe duda que el color es uno de los elementos más importantes del interiorismo. ¿Te gustaría saber cómo utilizarlos para crear armonía en un hogar?
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